la privación de libertad de niñas o niños que se encuentran junto a sus progenitores,
así como de aquellos que se encuentran no acompañados o separados de sus
progenitores, para cautelar los fines de un proceso migratorio ni tampoco pueden
fundamentar tal medida en el incumplimiento de los requisitos para ingresar y
permanecer en un país, en el hecho de que la niña o el niño se encuentre solo o
separado de su familia, o en la finalidad de asegurar la unidad familiar, toda vez que
pueden y deben disponer de alternativas menos lesivas y, al mismo tiempo, proteger
de forma prioritaria e integral los derechos de la niña o del niño.”
En relación con los desplazados internos, la Comisión Interamericana de Derechos
Humanos, en un informe sobre estándares interamericanos sobre movilidad humana
publicado recientemente, señala que el desplazamiento forzado interno afecta
múltiples derechos humanos, tales como el derecho de circular libremente en el
territorio del Estado; el derecho de escoger libremente el lugar de residencia; el
derecho a la integridad personal; el derecho a la vida privada y familiar; el derecho a la
propiedad; y el derecho al trabajo. Añade la CIDH que “en el caso de los niños, las
niñas y los adolescentes, derechos específicos son, además, el derecho a no ser
separados de la familia, el derecho a una especial protección y cuidado, y el derecho a
la educación. En el caso de las mujeres, el derecho a la adopción de medidas por la
vulnerabilidad a la violencia por su condición de desplazadas. En el caso de
comunidades y pueblos indígenas y afrodescendientes, el derecho a sus tierras y
territorios ancestrales y tradicionales, y el derecho a su cultura.”
También es relevante la cuestión de los desplazados y el cambio climático. La CIDH
ha valorado “el reconocimiento que hicieron los Estados de América Latina y el Caribe
en la Declaración de Brasil de 2014 con relación a los desafíos que plantean el cambio
climático y los desastres naturales, así como el desplazamiento de personas que estos
fenómenos generen en la región.” El cambio climático y diversos desastres naturales
ocurridos en los últimos años han provocado desplazamiento interno y migración
internacional, desde países sin servicios adecuados ni políticas de desarrollo
sostenible.